Concluyeron las vistas de la Comisión de Desarrollo Integral del Sur (DISUR), sobre el Puerto de las Américas Rafael Cordero Santiago y los resultados fueron contundentes.
Solo dos personas defendieron la "Solución Ponceña": la alcaldesa de Ponce, María Meléndez Altieri y su director del Puerto de Ponce, Jorge Hernández Lázaro. El resto de los deponentes, desde diferentes perspectivas, con datos, pensamiento, reflexión y emoción, defendieron las oportunidades de desarrollo que todavía tiene este proyecto.
Yo sostuve que, con la apertura del nuevo Canal de Panamá, el crecimiento económico de nuestros países hermanos latinoamericanos y con la fundación de la Unión de Países Suramericanos (UNASUR), las oportunidades de negocios para el Puerto, nunca han sido mejores.
Por eso es que Colombia, Brasil y Cuba están invirtiendo $1,800 millones en desarrollos portuarios. Ellos pueden ver lo que se avecina en términos de logística y transportación para nuestro hemisferio. Los únicos que no lo ven son la Alcaldesa y Hernández Lázaro.Desde la aprobación de la ley, hace más de un año, que autoriza la llamada "Solución Ponceña", hemos denunciado que es un embeleco innecesario.
Recientemente, salió a la luz que, además de haber sido un espectáculo político para intentar demostrar que se estaba haciendo algo con el Puerto, se convirtió en una medida de control absoluto y oligárquico por parte de cinco personas y un asesor Ad Honóreme, sobre los activos y negocios del Puerto las Américas.
Este control ha frenado todo tipo de desarrollo del Puerto y lo tienen en la insolvencia y al borde de la chatarra.
Procede que se derogue inmediatamente la "Solución Ponceña". El representante Víctor Vassallo Anadón ya lo ha anunciado.
Como también anticipamos hace alrededor de un año, la Junta de Directores de la Autoridad del Puerto las Américas (APA) debe reestructurarse para que represente verdaderamente los intereses del Sur. Esta recomendación también fue acogida por el representante Víctor Vassallo.
Sin embargo, los enemigos del Puerto siguen vigilantes y agresivos.
No va a ser fácil para el representante Vassallo Anadón que se aprueben las medidas legislativas que está recomendando. La alcaldesa de Ponce, su grupo oligárquico y los grandes intereses de San Juan, se opondrán tenazmente.
Es por eso que es indispensable concretar un grupo de poder político regional multisectorial y no partidista que impulse en bloque las recomendaciones de la Comisión DISUR.
Pero la agenda no termina ahí, también es necesario llegar a consensos sobre unas medidas indispensables de política pública para el desarrollo económico. La concesión del Puerto a un operador no es para enriquecerle. Es para que todos los sureños nos beneficiemos.
Derogada la "Solución Ponceña" y reconstituida la junta de directores de la APA, es indispensable establecer los parámetros bajo los cuales se podría negociar con un operador de calibre internacional y con un agente de desarrollo de zonas de valor añadido o un centro de distribución. Es la única manera de asegurarnos de que el Puerto propiciará desarrollo económico.
Los parámetros de negociación deben estar enfocados en el desarrollo del valor añadido y por ende, el desarrollo de toda la región Sur. No puede ser un regalo a un grupo extranjero, envuelto en papel de seda, como se hizo con el Aeropuerto de internacional en Carolina.
Los candidatos a operación y admi-nistración de las zonas de valor añadido deben explicar detenidamente cuáles son las inversiones que harán y cómo esto propiciará al desarrollo socioeconómico de la región Sur de Puerto Rico. Además, deben pagar impuestos justos y razo-nables. No podemos seguir entregando el patrimonio y financiando inversiones con subsidios y exenciones contributivas. No podemos seguir agravando la crisis fiscal que el gobierno central quiere que el pueblo pague.
El llamado es a constituir un bloque que hable con una sola voz para apoyar las medidas del representante Víctor Vassallo Anadón. Deben participar las organizaciones profesionales, Cámaras de Comercio y los ejecutivos municipales interesados y comprometidos en enfrentar a los enemigos del Puerto.
Ese fue el llamado que hizo el licenciado José Enrique Ayoroa Santaliz el 11 de enero de 2005 a todos los alcaldes de los municipios circundantes al Puerto. No hicieron caso. Ya vemos los resultados.
Sin este apoyo, las diligencias del representante Vassallo podrían quedar en meros papeles inconsecuentes.
Ha llegado el momento de actuar con firmeza. Estamos ante la última oportunidad de desarrollar el Puerto de las Américas para salir de la pobreza y el subdesarrollo.
(El autor es abogado, presidente del Bufete Emmanuelli y columnista de La Perla del Sur)
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